“Surgió un hombre enviado por Dios, que se llamaba Juan: este venia para dar testimonio de la Luz y preparar para el Señor un pueblo bien dispuesto" (Jn 1, 6-7:LC 1, 17)
La narración del Evangelio de Lucas, en relación con el nacimiento de Juan el Bautista, se centra en principio en la manifestación de misericordia que Dios ha tenido para con Isabel; ella, esposa de Zacarías, sacerdote descendiente de Abdías, afronta la esterilidad y asume con gran aceptación el prodigio que Dios ha realizado Con el nacimiento de Juan, Dios no solo ha mostrado misericordia con Isabel y Zacarías, sino con todo su pueblo, porque su hijo será el precursor del Mesías y del hijo de Dios. De él dice el libro del profeta Malaquías "Voy enviar a mi mensajero a allanar el camino delante de mi (el precursor de Yahvé)". Juan viene de Yóhánnan (lwávvnvs) que significa "Dios ha mostrado misericordia en su favor. Y con ello es preciso qu mencionar que su actuar gira entorno a su comunidad con el fin de exhortar a los judios para conducirlos a una vida honrada, justa y sometida a Dios mediante una conducta intachable. Ya por medio de su Bautismo, pretendía allanar los caminos de sus hermanos para el arrepentimiento y la obediencia con el fin de que, cuando Jesús llegara, encontrara fe en ellos para asumir los nuevos retos.
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