Amados hermanos, hoy celebramos la memoria de Nuestra Señora de Loreto, advocación vinculada íntimamente con la casa de la Sagrada Familia. De acuerdo con las leyendas, en aquella casa, ubicada en Nazaret, visitó el arcángel Gabriel a la Virgen María en la Anunciación del Señor, y vivió Jesús durante 30 de sus 33 años. La casa fue un sitio de reunión para la celebración eucarística de los primeros cristianos hasta que los musulmanes conquistaron Tierra Santa y amenazaron con destruir el lugar. De acuerdo con la tradición, Dios no quiso que aquella santa casa fuera profanada, por ello envió a unos ángeles a trasladarla hasta la región de Dalmacia (actual Croacia) y de ahí a un lugar llamado Loreto (Italia). Sin embargo, hay otras leyendas que aseguran que un comerciante llamado Nicéforo 'Angelo fue el que trasladó la casa hasta Europa. En el siglo XIV se construyó el santuario que rodea la Santa Casa, el cual se convirtió en un centro de peregrinación que ha sido visitado por santos y Papas. Dentro de la Santa Casa se encuentra una imagen de la Virgen María de trazas medievales y con una túnica tradicional decorativa. La imagen es negra debido a que se oscureció con el hollín de las lámparas de aceite de la capilla.
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